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¿Cuáles son los beneficios de consumir alimentos crudos?

Los crudívoros lo tienen muy claro: «Tomar alimentos crudos permite aprovechar al máximo su aporte vitamínico. Precisamente, la ingesta de frutas y verduras orgánicas, así como desecadas, aporta una mayor cantidad de nutrientes, sales minerales, oligoelementos, fibra, enzimas y antioxidantes, propiedades que se van perdiendo en el proceso de cocción. En este sentido, incluir los productos crudos en la dieta propicia más energía y ayuda a retrasar el envejecimiento».

Aunque más que una dieta el crudismo es un estilo de vida, es interesante destacar las ventajas que presentan algunos alimentos crudos o con un punto de cocción mínimo frente a los cocinados. Los más destacables, en este caso, son las frutas y verduras, así como algunos frutos secos y semillas.

No obstante, también hay que tener presente que algunos productos presentan más interés nutricional cuando están crudos y otros, sin embargo, cuando están cocidos. Por ejemplo, cocer el brócoli destruye gran parte de sus nutrientes esenciales como la Vitamina C, mientras que cocinar la zanahoria aumenta sus niveles de betacarotenos (que se convierte en vitamina A en el cuerpo).

La parte buena es que para una alimentación equilibrada y baja en grasas, la ingesta de este tipo de alimentos no cocinados no suele ser muy limitada porque solo contienen azúcares naturales, un motivo de más para saciar el apetito entre horas para no optar por carbohidratos.

Ventajas de los crudos

Aportan más energía

Cuando una persona cambia a una alimentación rica en alimentos crudos, experimenta un aumento de energía notable. Sobre todo, si se consume en momentos en los que nos sentimos cansados o más fatigados.

 

Menos calorías:

Además de disfrutar de un mayor porcentaje de nutrientes y vitaminas, los alimentos crudos también son una buena opción para conseguir un peso saludable. Si eres de los que no te atreves con las verduras crudas al 100%, cocínalas un poco menos para que queden algo duras y así conserven al menos una parte de estas propiedades.

 

Mejorará la regularidad intestinal

Una dieta de alimentos crudos te aporta fibra más que suficiente para mantener la regularidad intestinal, además de acelerar el movimiento intestinal y captar agua. Las digestiones serán más ligeras y no notarás esa sensación de cansancio aunque la cantidad que hayas consumido sea abundante.

 

Ayuda a descansar:


Si tus digestiones son menos pesadas tus horas de descanso serán más óptimas. Una alimentación que cuente con platos crudos evitarán el aletargamiento y harán que te despiertes con más energía.

 

Ayuda a frenar el envejecimiento: 


El envejecimiento de nuestras células se acelera si no recibe suficientes antioxidantes
que frenen la acción oxidante del oxígeno que respiramos y de los radicales libres resultantes de la polución o la exposición al sol, además del tabaco o de otras acciones ambientales. Por ello, la calabaza, el brócoli, el mango, arándano, alcachofa o la papaya, entre muchos otros, son más beneficiosos en estado puro que no sometidos a algún tipo de cocción o elaboración.

¿Qué alimentos son mejor en crudo?

En muchos casos, por tradición gastronómica estamos acostumbrados a ingerir determinados productos de una manera diferente a la que se debería para poder aprovechar los máximos beneficios, como ocurre por ejemplo con el ajo y la cebolla, que en crudo en cuando ofrecen más cualidades saludables.

Crudos:

  • Pimiento rojo
  • Cebolla
  • Lechuga
  • Brócoli
  • Berro
  • Ajo
  • Fruta
  • Avellana
  • Pistacho
  • Almendra

Cocidos:

  • Zanahoria
  • Espárragos
  • Espinacas
  • Tomate

 

Recetas: 3 cremas calientes para combatir el frío

Tres recetas para este otoño: crema de calabaza y lentejas rojas con curry, crema de lombarda y manzana y crema de quinoa.

Además de ser platos muy recurrentes, las cremas son una de las alternativas más eficaces contra el frío, junto con los caldos, sopas y bebidas calientes, debido a que suben nuestra temperatura corporal y se convierten en un gran aliado para recuperar la energía cuando nuestro sistema inmune se encuentra en horas bajas.

No obstante, la peculiaridad de la mayoría de las cremas es que se pueden tomar frías y calientes, por lo están especialmente recomendadas para seguir una dieta equilibrada y libre de grasas. Uno de los principales secretos para elaborar una deliciosa crema es contar con frutas y verduras ecológicas, que nos permitan disfrutar del verdadero sabor de cada alimento, de manera natural, sin la necesidad de enmascararlo con otros productos o condimentos.

Tratándose de un plato apto para toda la familia y para cualquier época del año, toca ser original y apostar por mezclas que incluyan alimentos nutricionalmente interesantes y que no nos obliguen a estar demasiado tiempo en la cocina. En esta ocasión, te ofrecemos tres propuestas calientes con las frutas y verduras de temporada para aprovechar su mejor momento de maduración.

 

CREMA DE CALABAZA Y LENTEJAS ROJAS AL CURRY

Sin duda, la calabaza no puede faltar en otoño, dado que es una de las verduras que más beneficios aporta en esta época del año, entre los que destaca su poder antioxidante y sus anti-radicales libres, además de su aporte en vitamina A y carotenos. Por otro lado, se trata de una verdura que casa a la perfección con las lentejas rojas y el sabor del curry potenciando, además, el resultado visual.

INGREDIENTES

  • Calabaza (1 kg)
  • Lentejas rojas (200 gr)
  • Caldo de verduras (1-1,5 litro)
  • Jengibre (2 gr)
  • Un yogur natural
  • 1 cebolla
  • Ajo en polvo
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Semillas de sésamo
  • Nata líquida
  • Curry molido (2 gr)
  • Cilantro freso

 

ELABORACIÓN

Pocha la cebolla en una cazuela durante unos diez minutos y corta la calabaza en dado regulares (retirando las pipas y las hebras del interior). Cuando la cebolla esté pochada, añade el curry, el jengibre rallado y el ajo en polvo y remueve.

Después, incorpora las lentejas rojas y la calabaza y mezcla bien. Pasados unos minutos échale el caldo de verduras y deja cocer durante unos 20 minutos. Si utilizas una olla a presión bastará con unos 10 minutos. El último paso, y también uno de los más importantes, es el de triturar todo. Utiliza un yogur natural para que le de más cremosidad al plato. A la hora

 

CREMA DE LOMBARDA CON MANZANA

Esta es una receta que nos encanta, además de por su sabor, por su original color. Para los niños es una apuesta segura, con la que seguro que triunfarás.

INGREDIENTES

  • Medio kilo de lombarda
  • 1 litro de caldo de pollo
  • 1 manzana
  • 100 gr de cebolla
  • Una cucharada de jengibre
  • 4 ajos negros
  • picatostes
  • Aceite, sal y pimienta

 

ELABORACIÓN

Trocea todos los ingredientes y ponlos a cocer en una olla junto con el jengibre molido. Después, añade el caldo y deja cocinar a fuego lento unos 20 minutos. Al igual que en la anterior receta, si utilizas la olla a presión bastará con unos diez minutos.

El siguiente paso será colar la preparación para separar el caldo de las cocción, aunque a la hora de triturar la fruta y la verdura deberás utilizar la mitad de ese caldo. Vete añadiendo el resto hasta que consigas la textura que deseas.

Si quieres darle un toque crujiente a la receta, añade trocitos de manzana y/o picatostes.

 

CREMA DE QUINOA

Ideal para los días fríos, dado que se trata de uno de los alimentos más completos. Aunque muchos creen que la quinoa es un cereal, no es así, se trata de una semilla. Es perfecta para celiacos y diabéticos. Y contiene una importante cantidad de vitaminas, minerales y proteínas.

  • 1 taza de quinoa cocinada
  • 1 manojo de espinacas
  • Medio litro de caldo de verduras
  • 1 cebolla
  • 2 tazas de leche desnatada o bebida vegetal de quinoa
  • Aceite, sal y pimienta

 

ELABORACIÓN

Primero pocha la cebolla y agrega la quinoa cocinada y las hojas de espinacas previamente cocidas. Echa sal y pimienta al gusto. Cubre los ingredientes con caldo vegetal y deja cocer durante unos 20 minutos. Después, deja enfriar la mezcla y tritura todo muy bien.

El último paso será devolver la mezcla a la cazuela y añadir la leche o la bebida vegetal para conseguir una textura más cremosa. Con diez minutos más al fuego será suficiente.

 

 

 

Prepara tu despensa para el otoño y protege tus defensas

Así es. Aunque nuestra mente aún no esté tan concienciada como nuestro cuerpo, ya ha comenzado oficialmente el otoño.

Los días se acortan, bajan las temperaturas y vuelven las rutinas, algo que puede afectar de manera directa a nuestro estado de ánimo y a nuestro cuerpo.

Pero… ¡cuidado! Nuestro organismo es muy sabio y los cambios también requieren de una preparación para no caer enfermos, porque al igual que hacemos con el armario, nuestra despensa también debe mudar, casi, por completo para dar prioridad a nuestras defensas y a nuestra energía.

Cualquier dieta en otoño tiene que ser capaz de contrarrestar el desgaste físico y mental, y nada mejor que los alimentos de temporada para conseguirlo. La naturaleza es sabia y en esta época nos da productos con menos cantidad de agua, pero más cítricos y ricos en vitaminas.

¿Qué es lo que no debe faltar en tus menús de otoño?

FRUTOS SECOS: Principalmente, nueces, almendras y pistacho tostado porque son ricos en fibras, proteínas y tienen una potente acción antioxidante. Además, su acción positiva sobre las grasas saturadas protege de la enfermedad cardiovascular. Eso sí, debes ingerirlos en pequeñas cantidades para no abusar de las calorías que requiere una dieta equilibrada.

MANZANAS: Junto a las uvas, kiwis y peras son las principales frutas de temporada. Son ricas en vitaminas y un aliado contra el estreñimiento, un problema muy común en esta época del año. Como mínimo, debes consumir una manzana al día.

CASTAÑAS: Un otoño sin castañas…¡No es otoño!. Y no sólo como tradición, sino porque se trata de un alimento que te ayuda a combatir el cansancio y a aumentar los niveles de energía por su presencia de vitaminas del grupo B. Lo mejor es tiene menos calorías que la mayoría de frutos secos.

CEREALES y PAN INTEGRALES: Conservan toda su riqueza porque no sufre procesos de refinamiento donde se pierden muchos nutrientes como el hierro o la vitamina B, que se encuentran en la cáscara de los granos. Por otro lado, tienen una alto contenido de fibra. Su consumo habitual mejoran el tránsito intestinal y el estreñimiento. Por ejemplo, el arroz integral es un alimento básico, muy energético y digestivo. Por su parte, el pan integral tiene las mismas calorías que el pan blanco, pero aporta tres veces más fibra.
CALABAZA: Tiene una fina textura y un sabor sutil que le permite adaptarse a cualquier menú. Debido al grueso de su piel se conserva muy bien durante meses. Entre los beneficios para la salud hay que destacar su contenido en ácidos grasos Omega 3 y que es un alimento rico en vitamina A.
SETAS y CHAMPIÑONES: Ricos en proteínas, vitaminas y minerales. Destacan por ser unos alimentos perfectos para reforzar el sistema inmunitario y proteger del frío. En este grupo de alimentos, también se recomienda consumir reishi y shitake, denominados como Superalimentos, gracias a que aumentan nuestras defensas.

LENTEJAS Y GARBANZOS: Las legumbres que mejoran nuestro sistema digestivo son, principalmente, los garbanzos y las lentejas pardinas. Ambos producen una sensación de satisfacción y bienestar digestivo. Lo mejor es combinarlas con algún cereal, donde la proporción de este último sea bastante más grande, por ejemplo 70% de arroz y 30% de garbanzos para reducir la sensación de hinchazón o gases, así como separarlo de productos animales (carne, chorizo…). En este sentido, consumir legumbres ecológicas nos segura ingerir un producto que mantiene todos sus nutrientes y está libre de conservantes y colorantes.

BRÓCOLI, COLIFLOR Y ROMANESCO: Son los sustitutos perfectos de pastas, arroces y harinas. Tienen un perfil muy completo, ya que posee muy pocas calorías, pero contienen gran parte de las vitaminas y minerales que nuestro organismo necesita a diario. Ideales para una buena digestión, así como para lograr una sensación de saciedad.

CHOCOLATE NEGRO PURO: Puede ayudar a combatir los síntomas de la fatiga crónica, ya que se cree que su consumo ayuda mejorar la acción de los neurotransmisores, como la serotonina. El cacao promueve la buena circulación sanguínea y es rico en antioxidantes. Por ejemplo, el cacao puro desgrasado, perfecto para incluir en el desayuno, beneficia el tránsito intestinal y contiene propiedades estimulantes contra la ansiedad.

JALEA REAL: Si hay un reconstituyente por excelencia para cualquier época del año, pero sobre todo para el otoño, ese es la Jalea Real. Su ingesta refuerza el sistema inmunológico y está recomendada para personas de cualquier edad. Es un gran aliado contra el frío y también cumple una función antiséptica en el caso de contraer gripes y catarros. Además, está presente en multitud de complementos alimenticios para el fácil consumo diario.

A nivel general, también es tiempo de infusiones después de las comidas, compotas de frutas, caldos y carne blanca. Así como de cocciones a presión, estofados o elaboraciones al horno.

Aguas infusionadas con sabor a verano y beneficios de invierno

Fáciles de elaborar, sabrosas, extremadamente refrescantes y muy saludables. Cuatro propiedades que describen a la perfección las famosas aguas infusionadas en frío con frutas, hortalizas o hierbas -o como las llaman en América del Sur ‘aguas saborizadas’-.

Es cierto que son más apetecibles cuando aumentan las temperaturas. De ahí que se conozcan como las ‘aguas de verano’, pero es aconsejable consumirlas en cualquier época del año, porque el poder de sus ingredientes ayuda a cuidar y proteger nuestro organismo.

En todo caso, con estas bebidas bajas en calorías podemos volcar nuestra imaginación culinaria y aprovechar al máximo las propiedades de las frutas y verduras ecológicas, puesto que también aprovecharemos las pieles de muchas de ellas para que la infusión en frío sea mucho más aromática.

  • ¿Cómo se elaboran? Agua fría (un litro o litro y medio), hielo y los ingredientes que más te gusten (siempre lavados y cortados, preferiblemente en trozos grandes).
  • La mezcla necesitará entre diez y doce horas de reposo para que el líquido coja el sabor que deseamos. Si se agita un par de veces durante el proceso se conseguirá más sabor.
  • Por otro lado, si quieres mantener la mezcla en la nevera más de 24 horas retira los ingredientes para que no se oxiden.
  • Cuanto más fría, más apreciarás todos los matices de sabores.
  • Los restos de las licuadoras de presión en frío también son perfectos para preparar este tipo de aguas, igual que los de haber preparado horchata o leches vegetales
  • ¿Se pueden comer los ingredientes? Valora el estado de la fruta al final del proceso. Algunos alimentos se quedan muy blandos, pero otros permanecen igual de tersos.
  • ¿Cuáles son las mejores combinaciones? Por ejemplo, el pepino siempre va bien con cualquier cítrico; el mango y el limón son grandes aliados de la menta; y los frutos rojos valen para ir solos o acompañados. Aprovecha el sabor de hierbas como el perejil y la melisa y las propiedades de especias como el jengibre, la canela o la pimienta rosa.

Algunas propuestas más para sorprender a tus invitados:

  1. Mango, lima y albahaca: La piel de medio mango, media lima en rodajas finas y una rama de albahaca –con sus hojas, o un par de ramas un poco aplastadas sin ellas– darán como resultado un agua dulce y frutal.
  2. Zanahoria con granada y salvia: Desgrana una granada y pela en tiras una zanahoria. La salvia endulzará la mezcla en su justa medida.
  3. Limón con menta y albahaca o cilantro: Exprime medio limón e incluye otro y medio más en rodajas. La menta y la albahaca aportará un gran poder refrescante.
  4. Menta, manzana y cítricos: Utiliza una naranja, media manzana, 2 ramas de menta y 12 cc de almíbar (una variante del almíbar es el edulcorante líquido, el agave o la salvia)
  5. Sandía, melón y albahaca: Media sandía en trozos, una rodaja de melón también troceada y un par de ramitas de romero.
  6. Pepino con toronja y romero: Corta en rodajas finitas el pepino y añade un par de ramitas de romero junto a un toronjo o pomelo.
  7. Mora con frambuesa, fresa y menta: Con ocho moras y frambuesas y cuatro fresas en rodajas será suficiente. Añade hojas de menta al gusto (entre 3 y 5).

Visita nuestros supermercados Oh!MyBio en León (Burgo Nuevo, 22) y Madrid (Hortaliza, 38 y Raimundo Fernández Villaverde, 11) y consigue a diario toda la fruta y verdura ecológica que necesites para elaborar tus aguas infusionadas en frío. Recuerda que los productos ecológicos te aportan un mayor porcentaje de vitaminas, minerales y nutrientes debido a que están libres de tóxicos y no han sido tratados con abonos.

Receta de macedonia con yogur y avena

Sabías que….

El nombre de ‘macedonia de frutas’ tiene su origen en el Imperio de Alejandro III Rey de Macedonia (356-323 a.C), marco histórico en el que se alternaron razas y culturas, idiomas y tradiciones y diversos legados religiosos y estilos artísticos, entre otras cosas, lo que dio lugar a un ‘cóctel’ de pueblos y naciones que sirvió de modelo para que durante el siglo XVIII se empezara a utilizar el nombre de ‘Macedonia’ para referirse al conjunto de elementos heterogéneos de cualquier ámbito, no sólo del culinario.

Receta de Macedonia con yogur y avena

Ingredientes

Melón, Frambuesa, Papaya, Melocotón, Pera y Plátano (varía las frutas a tu gusto), sirope de agave, galletas de avena y yogur de soja natural (si lo prefieres, atrévete con algún sabor).

Elaboración

Pelamos y lavamos la fruta. Si no la vamos a consumir en el momento, es mejor pasarla por zumo de limón y mantenerla en la nevera para que no se oxide.

Después troceamos las piezas pequeñas y las añadimos a un bol para mezclarlas con el yogur. En otro recipiente, ponemos en el fondo las galletas de avena machacadas (mételas en una bolsa de plástico y aplástalas con el mortero), echamos la mezcla de fruta y yogur rociamos unos hilos de sirope de agave para darle un toque dulce, pero muy natural. ¡Bon appétit!

Si deseas más información sobre los beneficios de las frutas ecológicas frente a las convencionales consulta este post del blog de Oh!MyBio aquí

 

Y tú… ¿Sabes diferenciar la fruta ecológica de la convencional?

¿Realmente sabemos diferenciar los alimentos por su origen o calidad sin antes probarlos? O más importante aún… ¿Cuáles son los beneficios de la fruta ecológica frente a la convencional?

Algo tan cotidiano como hacer la compra de alimentos frescos pone, a menudo, nuestra capacidad de elección a prueba… Sobre todo cuando nos acercamos a la sección de frutas y hortalizas, donde la diversidad y la falta de información sobre los productos de temporada y su proceso de cultivo nos hacen dudar.

No temas. Aunque a primera vista las similitudes te parezcan más numerosas que las diferencias, has de tener claro que un producto ecológico siempre lleva un sello de calidad que garantiza la trazabilidad y autenticidad de su proceso de cultivo a través de los recursos naturales. ¿Esto qué significa? Que se trata de un vegetal que no lleva químicos (conservantes, aditivos, plaguicidas…), sino que se ha desarrollado con fertilizantes orgánicos. De esta forma, evitarás la ingesta de sustancias tóxicas que puedan perjudicar tu salud.

Del mismo modo, el consumo de fruta y verdura ecológica también es clave para mejorar tu alimentación, gracias a la cantidad de nutrientes, vitaminas y minerales que contienen por haber sido sometidos a un proceso natural, lo que garantiza la conservación de sus propiedades. Ello hace, además, que el sabor de estos productos sea auténtico y más sabroso. ¡Lo notarás con el primer bocado!

Lo ecológico también marca la temporada

Así mismo, una de las características que viene unida a los productos vegetales ecológicos es la proximidad y, por ende, la temporada adecuada para su recolección y su consumo. ¡Ten en cuenta que la naturaleza es sabia y siempre ofrece lo mejor de sí misma! Su producción es sostenible y evita la contaminación, por lo que también favorece al desarrollo de las zonas rurales.

Por ejemplo, en los meses más fríos destacan los cítricos por su gran aporte vitamínico (naranja, mandarina, limón …) o frutas como los kiwis y la chirimoya por su alto contenido en fibra. Sin embargo, en verano requerimos productos con más agua, como es el caso de la sandía, el melón, el aguacate o la pera. Y para proteger la piel del sol, no debes olvidar que la zanahoria, la remolacha, la calabaza, el tomate o el mango son ricos en betacarotenos.

Pero si quieres ser más exacto a la hora de seguir la recomendación de los expertos de consumir entre tres y cinco piezas al día para mantener una alimentación equilibrada, aquí te dejamos un pequeño gráficos con las frutas y verduras de temporada que se avecinan en estos meses de calor. ¡Esperamos que te sirva de guía!

Toma nota de las frutas y verduras de temporada para los meses que se avecinan
Fuente: Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente

Como ya sabrás, en Oh! My Bio lo más importante junto al fomento de una alimentación saludable es la conservación del Medio Ambiente y la sostenibilidad, lo que nos lleva a  ofrecer una amplia variedad de frutas y verduras autóctonas de temporada que adquirimos directamente a los agricultores. Tanto en el supermercado de León como en los de Madrid disponemos de productos 100% ecológicos, lo que certifica que no están sometidos a procesos químicos ni son tratados con abonos. No obstante, si hay alguna cuestión que te inquieta sobre el mundo ecológico, no dudes en consultar a los especialistas que trabajan en nuestros establecimientos. ¡Benefíciate de lo que la naturaleza te ofrece en cada momento!