Si estás pensando en organizar un viaje con tu familia y amigos para despedir el año te proponemos una alternativa: practicar turismo responsable.
En los últimos años, el aumento de la conciencia sobre el impacto de nuestras actividades en el medio natural, económico y social se ha extendido a la forma de hacer turismo, lo que ha originado la aparición de una nueva manera de viajar denominada turismo responsable.
El turismo responsable o sostenible es aquel comprometido con ejercer un bajo impacto sobre el medio ambiente y la cultura local. Según la Organización Mundial del Turismo, se define como aquel que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas.
Desde hace unos años, un organismo acreditador vinculado a la UNESCO y llamado Consejo Global de Turismo Sostenible concede el certificado «Biosphere World Class Destination», que reconoce a empresas, destinos, productos y establecimientos turísticos que han hecho del turismo sostenible el eje central de sus actividades. Barcelona fue el primer destino urbano del mundo en obtener esta certificación, en 2011.
Es importante resaltar que España ofrece el 50% de la oferta de todos los destinos turísticos ecológicos del continente.
CÓMO ORGANIZAR UN VIAJE SOSTENIBLE
- Antes de partir: busca la mayor cantidad de información posible sobre la zona que vas a visitar. Intenta elegir operadores turísticos, compañías aéreas y hoteles comprometidos con las comunidades de acogida y con el medio ambiente.
- Durante el viaje: mantén la mente abierta a la cultura y costumbres locales y prueba la gastronomía local. Intenta establecer contacto con la población para conocer un poco más la manera de vivir de la zona. Asimismo, a la hora de adquirir regalos, busca artesanía local, ya que estarás potenciando su economía.
- Después del viaje: intenta siempre cumplir los compromisos adquiridos con la gente local como, por ejemplo, enviar una foto o una postal.
DECÁLOGO PARA PRACTICAR TURISMO SOSTENIBLE
Para poder aplicar todos los principios que rodean a un turismo sostenible, queremos hacerte partícipe del decálogo que publica InterMundial. Toma nota ¡Merece la pena!
1. Elige destinos y alojamientos de bajo impacto ambiental
Se trata de establecimientos o apartamentos que son responsables con el medio ambiente en función de su enclave, de los materiales con los que están construidos o del tipo y uso de las energías. Alojarte en una casa rural que funcione con energía solar, reservar en un hotel que haga por reducir el consumo de agua o quedarnos en una cabaña bioclimática (paredes aislantes con elementos naturales o reciclados) son formas de contribuir al turismo responsable. Apuesta por playas de bandera azul y rutas de senderismo como actividades de ocio.
2. No derroches energía
Cuando nos alojamos en un hotel o alquilamos un apartamento nos solemos despreocupar del gasto de agua o electricidad con la excusa de que ya tenemos todo pagado. ¿Quién no se ha dejado alguna vez la tarjeta puesta en la habitación y el aire acondicionado ha estado funcionando durante horas? Además de a las cuentas del negocio, con este despilfarro energético estamos perjudicando al territorio al que hemos viajado y al planeta en general.
3. Contribuye a la economía local
Consume productos y servicios propios de la zona y que dinamicen su economía, es decir, que impliquen a otras personas y empresas del territorio. Por ejemplo, comer en restaurantes que ofrezcan comidas típicas elaboradas con productos autóctonos, buscar un souvenir de artesanía, disfrutar de las fiestas y tradiciones, o alojarte en establecimientos gestionados por la comunidad local.
4. Sé respetuoso con el entorno
Trata el entorno como si fuera tu casa y mantelo limpio. Infórmate sobre si hay cerca de la zona un sistema de recogida de residuos.
5. Cuida con la naturaleza
Uno de los principios fundamentales del turismo sostenible es cuidar el entorno natural y animal. No tires residuos, ni arranques plantas autóctonas, por no hablar del respeto a los animales.
6. Aplana las cajas y contenedores
De esta forma reduciremos el volumen de los embalajes. Y cuando tires las botellas de plástico en su contenedor correspondiente quita los tapones.
7. Evita el coche siempre que puedas
Contempla el medio para desplazarte a tu destino y también aquellos que usarás para moverte durante tu estancia. Opta por transportes de conducción eficiente que ahorren energía o con reducidas o nulas emisiones contaminantes (eléctricos). Intenta usar el transporte público, y, cuando sea viable, moverte en bicicleta o andando.
8. Cuanto menos papel, mejor
Intenta tener siempre las reservas, billetes, mapas, guías o facturas en formato digital, así evitarás el consumo excesivo de papel.
9.Ser considerado con la población local
Viajar implica relacionarse con las gentes del lugar que visitas y, para ello, es necesario conocer, comprender e intentar adaptarse a su carácter, hábitos, normas y costumbres. Hay que evitar imponer nuestro estilo de vida allá donde se viaje. ¿Ejemplos? Informarse sobre usos a la hora de pagar, como el regateo o las propinas, conocer las formas de saludar o los horarios para comer, respetar la vestimenta en lugares de culto…
10. Difunde tu experiencia
Cuando estés de vuelta, reflexiona sobre lo que has conocido y aprendido en tu viaje y sobre tus logros como turista responsable. Cuéntaselo a tus amigos y familiares y comparte con ellos las prácticas y las ventajas del turismo responsable cuando viajéis juntos.