El turrón es el dulce español más internacional que pueda existir. Se presume que ya en la época griega se preparaba una pasta compuesta por frutos secos (almendra, principalmente) y mieles que servía a los deportistas como producto energético.
Siglos después, lo árabes comenzaron a tomarlo durante las celebraciones religiosas, ‘contagiando’ esta costumbre a los pueblos europeos y, más especialmente, a los de tradición cristiana, que aumentan su consumo durante las fechas navideñas.
Con el paso de los años, la producción de turrón ha ido evolucionando de cara al consumidor, ofreciendo una amplia variedad de formatos y sabores, con menos azúcares y con un proceso de elaboración más comprometido con el medio ambiente.
Ejemplo de ello son los turrones ecológicos Solé, que, con un ingrediente estrella como es el chocolate, han conseguido darle a las Navidades un extra de sabor natural que despierta todos los sentidos.
La base del cacao de estos turrones es la cuidada selección de sus ingredientes. Las materias primas que son utilizadas provienen, exclusivamente, de cultivo ecológico controlado, libre de fertilizantes y pesticidas o sustancias como la lecitina, presente en las membranas de las células vegetales y animales.
El cacao, ingrediente principal de el turrón de Solé
El cacao proviene al 100% de la República Dominicana y la caña de azúcar sin refinar de Brasil. Además, también se diferencia por su envase biodegradable con el medio ambiente, eliminando el papel de aluminio en los envoltorios por ser un material no reciclable y contaminante en el proceso de extracción.
Los turrones ecológicos Solé son conocidos por su fino sabor y su alta calidad. El resultado es una combinación que satisface a los paladares más sofisticados con un excelente bocado y el sabor más auténtico del chocolate.
El problema vendrá a la hora de elegir tu favorito: turrón de chocolate y nuez, de chocolate y quinoa, de chocolate y avellana, de chocolate y arándanos o de chocolate y almendras… ¡En la variedad está el gusto, sin duda!
Y recuerda que el chocolate elaborado con cacao 100% puro posee un alto contenido en polifenoles antioxidantes, lo que lo convierte en un buen aliado contra la prevención de problemas cardiovasculares. ¡Nunca un capricho navideño fue tan saludable!