¿Quién puede resistirse al auténtico placer que supone sentarse frente a un libro o compartir una tertulia con un amigo mientras saboreamos una deliciosa infusión caliente en un día frío?
Además de los beneficios sensoriales, las infusiones son una de las mejores maneras de aprovechar las propiedades de las plantas, debido a que son el método más popular y sencillo que existe para extraer los principios activos de plantas y utilizarlos para el bienestar del organismo.
La fitoterapia, como se conoce a este método de extracción, ha sido considerada desde la antigüedad como un medio de prevención y curación de diversas dolencias, así como una herramienta para el alivio de una amplia variedad de síntomas comunes como las molestias estomacales, gases, tos…
Actualmente, este tipo de bebida gana cada vez más adeptos de todas las edades porque nos ayuda a ‘exprimir’ las bondades de muchos ingredientes que, de otra manera, no probaríamos por desconocimiento o desconfianza… Pero, ¿Cuáles son las mejores infusiones?
Infusiones relajantes
Para los días más duros, nada mejor que llegar a casa y preparar un té de Valeriana, de Pasiflora, de Lavanda, Melisa, Verbena, una Tila o una infusión de Hierba Luisa.
Con estas plantas conseguirás reducir el estrés y el ritmo de tu respiración y eso te ayudará a tener un sueño más agradable. Incluso, puedes utilizar las bolsitas de té en la bañera para conseguir un delicioso y relajante baño con efecto calmante.
Prueba con una mezcla de manzanilla con jengibre fresco (con unos pequeños granos rayados servirá) antes de irte a la cama y evitarás el insomnio.
Para las defensas bajas
Con la llegada del frío es muy probable que nuestras defensas se vean amenazadas de manera temporal, lo que repercute en nuestra rutina diaria e incluso en nuestro estado de ánimo. Para ello, las hierbas más idóneas para ‘atacar’ a los virus son la equinácea, el boldo, el ginseng, rooibos o el astrágalo chino.
La mayoría de ellas estimulan el sistema inmunitario y ayudan a renovar las células dañadas o envejecidas. En el proceso de recuperación, son grandes aliadas para reforzar las defensas de manera natural y si están combinadas con otras hierbas o especias, mejor que mejor.
Una propuesta con propiedades antisépticas es la infusión de naranja, menta, canela y miel, eficaz para mantener a raya las infecciones y aprovechar la vitamina C de la naranja. Sólo tendrás que mezclar el zumo de media naranja en una taza de agua caliente con una rama de canela (o dos pizcas en polvo), una cucharadita de miel y 2 o 3 hojas de menta fresca.
Para complementar una dieta de adelgazamiento
Las infusiones son de gran ayuda cuando queremos perder esos kilos que nos sobran. Nos ayudan a tener sensación de saciedad, a consumir más cantidad de agua y, en algunos casos, a acelerar el metabolismo.
Algunos ejemplos para este objetivo son el Té Verde, el Té Rojo, Cola de Caballo, Rooibos o la infusión de canela. El Té Rojo y el Verde ayudan a desintoxicar el organismo, mientras que la Cola de Caballo destaca por su poder diurético para evitar la retención de líquidos. En el caso de la Canela, es importante destacar que fomenta la reducción de los niveles de azúcar en sangre.
En este caso, nuestra propuesta es una infusión de cayena, canela y limón, capaz de calentar el cuerpo acelerando el metabolismo y potenciando que quememos más calorías. Con dos pizcas de pimienta de cayena, una rama de canela y zumo de medio limón mezclado con el agua caliente será suficiente.
Para la digestión
El hinojo, el jengibre, el poleo, el boldo o la menta también son idóneas para mejorar el proceso digestivo y unidas al regaliz, por ejemplo, multiplican su eficacia. Por ejemplo, la menta es muy útil para la expulsión de gases o para evitar incómodos espasmos procedentes del intestino.
Por su parte, la albahaca con miel también ayuda a deshacerse de los dolores de estómago o las náuseas.
Contra los dolores menstruales
La menstruación dolorosa es un trastorno bastante común a lo largo de la vida de las mujeres. ¿Quién no ha padecido molestias en el abdomen, en la zona de los riñones o inflamación de vientre?
Hay hierbas naturales que pueden ser eficientes para aminorarlas de forma totalmente inofensiva, como es el caso de la manzanilla, el jengibre, la salvia o la onagra que alivian los cólicos y, en algunos casos, mejoran el flujo de la menstruación.
Si mezclas en agua caliente 8 frambuesas y un poco de jengibre fresco rallado también potenciarás la relajación de los músculos uterinos.
Cómo hacer correctamente una infusión
Aunque la elaboración es muy sencilla a primera vista, hay un par de claves que conseguirán que degustes tus infusiones en su punto exacto. Nunca debes poner la planta a hervir junto con el agua.
Lo ideal es calentar el agua hasta unos 85 grados, retirar del fuego y colocar la hierba a infusionar. Pero si no puedes controlar la temperatura, pon el agua a hervir y, cuando la retires, espera unos dos minutos antes de poner los ingredientes naturales que escojas. El tiempo de infusionado puede variar según la planta, pero como media son cinco minutos.
Cómo conservar una infusión
No es aconsejable preparar una infusión y guardarla, ya que se oxida y pierde propiedades. Si la idea es preparar mayor cantidad para llevarla de viaje o al trabajo, debe de estar reservada en la nevera.